Opinión en El Tiempo, julio 12 de 2009

Las informaciones proporcionadas a los medios de difusión por inteligencia militar sobre los misiles que habría adquirido la guerrilla forman parte de lo que los círculos castrenses llaman con eufemismo "operaciones sicológicas", muestran evidente sesgo, exhiben aspectos endebles y sospechosos y confluyen al mismo propósito repetitivo: generar adhesión a través de la presión sobre la insurgencia y justificar gastos para mantener el sistema aceitado y favorable a los intereses dominantes, en mi opinión oscuros, inmorales y censurables. La noticia, si fuera cierta, que jamás lo sabremos en este mar de dudas y babas en el que vive Colombia, demostraría por enésima vez que la espiral de la guerra no tiene fin y que por esta vía nos dirigimos al despeñadero del fracaso...